Me encanta llamarlo “mi primer hummus” y no porque sea el primer hummus que he hecho (los hago ya con los ojos cerrados) sino porque al no llevar ajo ni comino ni tahín es taaaan suave que si alguien no ha probado el hummus, empezar con este mola. Además la albahaca le da ese toque “pasta” “pizza” que le queda súper.
ingredientes:
1 bote grande de garbanzos cocidos
20/30g de hojas de albahaca fresca (sólo las hojitas)
2 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
30g de agua
el zumo de 1/2 limón exprimido con las manos
sal
parmesano
empezamos:
•ponemos los garbanzos en un escurridor y los lavamos debajo del grifo
•guardamos unos cuantos garbanzos para decorar y el resto los ponemos en un bol (es más fácil de triturar en un recipiente ancho) y añadimos el resto de ingredientes: los 20/30g aproximadamente de albahaca (un buen puñado), un pellizco generoso de sal, las 2 cucharadas soperas de aceite virgen extra, el zumo de medio limón aprox (exprimido con las manos) y 30g de agua (no ponemos más porque queremos que quede espeso)
•trituramos hasta que quede un paté homogéneo
•cogemos un aro de inoxidable y lo montamos como si fuera un timbal (por eso nos va mejor que quede espeso). Lo servimos con lascas de parmesano por encima y los garbanzos que hemos apartado, unas hojitas de albahaca y un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Servido en n un bol bonito también queda reprecioso.
Buenísimo como aperitivo, tremendo con una crep, en un bocata con hojitas de espinaca baby… ya os iré poniendo más ideas
Se mantiene bien un par de días en la nevera (no más porque la albahaca se oxida un poco)
Aquí os dejamos la receta en formato jpg por si os apetece descargarla
Muchísimas gracias por acompañarnos 🙂
¡que tengáis una día con eSe!
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